El otro día tomando una caña, sin duda el mejor momento del día, un amigo me pidió consejo sobre dónde viajar. Quería dar una alegría a su mujer, ya que después de una pelea judicial contra su empresa, por un despido improcedente, habían conseguido ganar y tenían un dinero extra para poder viajar. Él quería regalarle un viaje inolvidable. Mi recomendación fue clara: vete a Praga. Sin duda una ciudad preciosa y que no está tan masificada como pueden ser las de siempre como París, Roma o Londres.
Mi amigo solo tenía un dilema, qué hacer con su perro. Ya le dije que no tiene problema, que ahora hay empresas que llevan tu mascota en avión tan ricamente a tu lugar destino. Así que se decidió a ir a la capital de la República Checa después de pedir información a Star Cargo.
¿Por qué Praga?
Es, como sucede en muchas otras antiguas ciudades europeas, como atravesar un portal en el tiempo. Te vas a encontrar rodeado de mercados medievales y plazas que aun conservan esa esencia a pasado que tanto nos gusta encontrar a los amantes de la historia y los viajes.
Qué ver
Si te gusta ver arquitectura, en Praga te vas a sentir de maravilla. No tenéis que ser expertos en todos los estilos artísticos para disfrutar de la variedad arquitectónica de la metrópolis. Apuntad todos estos sitios la Rotonda de San Martín, la iglesia de Nuestra Señora, el Palacio Wallenstein o la Casa Municipal se os grabarán en la memoria para siempre. El icono de la arquitectura moderna praguense es la Casa Danzante de Frank Gehry, apreciada es también la nueva urbanización del barrio de Karlín o la Biblioteca Técnica Nacional.
Pocas ciudades pueden estar orgullosas de tener un río tan encantador como es el Moldava (Vltava). Solo en Praga lo atraviesan unos treinta puentes y pasarelas, sus aguas abrazan diez islas, cada día pasan por el decenas de barcos, lanchas o barcas de pedales.
Los jardines y parques históricos son uno de los tesoros de Praga. Hay unos doscientos, los más antiguos datan de la Edad Media, y generalmente ofrecen vistas impresionantes de la ciudad. Son parte obligatoria de nuestro viaje una visita a los Jardines Palaciegos bajo el Castillo de Praga, los jardines en el monte Petřín o el Jardín de Wde allenstein .
Aunque la metrópolis checa tiene el apodo de Ciudad de las Cien Torres, en realidad está decorada con unas mil torres y torrecitas. Podéis deleitaros con las vistas al corazón antiguo de la ciudad desde la galería de la torre del Ayuntamiento de la Ciudad Vieja.
Cómo ir
En Praga hay una tupida red de transporte urbano que funciona de forma admirable; sus ejes fundamentales son las tres líneas de metro (que se distinguen según los colores: A, B y C), pero además hay tranvías, autobuses, transbordadores y un funicular que sube a Petřín.
Qué comer
Las recetas a veces se parecen a las bávaras o austriacas, combinan a menudo patatas con carne o con diversos tipos de „knedlík“ (especie de masa de pan cocida) y con diversas salsas. Emplea, además, a menudo, setas secas, repollo, verduras de raíz; y de la carne, el cerdo, el pato y el ganso, y, en temporada, la de caza. Precisamente el pato, asado al horno y crujiente, es uno de los reyes de la cocina checa; se sirve con „knedlík“ (pan cocido) de harina o de patata o ambos, y con lombarda agridulce . Si sólo tiene tiempo de probar una comida en Praga, le recomendamos el pato. Alrededor del 11 de noviembre, fiesta de san Martín, también se cocina de forma parecida el ganso.
Los ‘knedlíky’ dulces son una especialidad que no debería irse sin probar . El ‘knedlík normal se hace con una masa habitualmente de harina, pero al dulce se le suele añadir requesón, patata o levadura; antes de cocerlos se rellenan con frutas de temporada, como por ejemplo los arándanos . Los checos comen estos „knedlíky“ dulces como comida principal, pero también pueden pedirse como postre.
Qué tomar
Si eres amante de la cerveza, ya puedes comenzar a saltar de alegría. Tienes que ir a un sitio que se llama Nusle Zly Casy donde se sirve la mejor cerveza del país, es un lugar con 24 grifos donde se alternan diferentes estilos. También es muy popular, Lokál, donde podéis disfrutar, aparte de la excelente cerveza de Pilsen, también de la tradicional cocina checa. Praga también tiene sus cafeterías famosas, que se visitan también para rendir homenaje a los personajes célebres que las frecuentaban para tomar un buen café.
Esto es una breve guía de lo que puede encontrar en Praga, seguro que te va a encantar.