Muchos de los que nos leéis lo hacéis desde España y por eso conocéis de primera mano de lo que os vamos a hablar y es que el jamón, nuestro protagonista en el post de hoy, es un alimento bueno, saludable y, por supuesto, de nuestra tierra. Pero aunque esto sea así lo cierto es que este no es el único y es que en nuestro país tenemos muchas bondades pero si una destaca sobre las demás, esta es la alimentación y es que tan solo hace falta darse una vuelta por nuestras tierras y por nuestros campos para comprobar la gran calidad de la que gozan todos nuestros productos, pero no solo eso, sino que además de nosotros mismos, el resto de ciudadanos del mundo también lo saben, por lo que cada vez exportamos más alimentos de nuestro país y es por ello por lo que cada vez son más los extranjeros que disfrutan de nuestra gastronomía, ya sea en sus países de origen o aquí cuando vienen a visitarnos.
Como os comentábamos, uno de estos grandes embajadores de nuestro país es el jamón y es que este es uno de los alimentos de nuestra dieta que más beneficios nos aporta, por lo que no es de extrañar que haya un jamón en cada casa y que poco a poco vaya bajando y es que, como os decimos, esta es una de las estrellas de los hogares españoles. Sin embargo, como ocurre con todo en nuestra vida, siempre debemos de tener claro que jamón vamos a comprar y es que dentro de todos los que podemos optar, algunos de ellos son mejores que otros. Es por ello por lo que, si vosotros no conocéis bien el producto, nosotros os recomendamos que os decantéis por acudir a Jagus, donde encontraréis únicamente un producto de primera calidad que seguro que os encantará y que, además de alegrar a vuestro paladar, lo más probable es que os permita beneficiaros de una serie de cuestiones, entre las que destacamos:
- Antioxidantes: su contenido en selenio y zinc contribuye a la lucha contra el daño oxidativo y los radicales libres. Esto, unido a la presencia de una gran cantidad de minerales -fósforo, magnesio, potasio…-, nos ayudará a mejorar la función cognitiva, permitiéndonos una mayor capacidad de concentración, atención y comprensión. Según indica la FEN, una ración de jamón cubre el 21% de la ingesta recomendada de fósforo.
- Más energía: otra de las ventajas nutricionales del jamón serrano es que se trata de una excelente fuente de vitaminas del grupo B. Estas ocho vitaminas están íntimamente relacionadas con el metabolismo celular y ayudan al organismo a obtener energía de los alimentos que consume. Por eso, su déficit se asocia al cansancio, la fatiga y la falta de fuerzas.
- Las mejores proteínas: Las proteínas que más nos interesan son las de alto valor biológico, es decir, las que contienen todos los aminoácidos esenciales (aquellos que debemos obtener a través de la dieta). En este sentido, el jamón serrano es una excelente fuente de proteínas de calidad.
- Control de peso: si buscas regular tu peso y procuras reducir los carbohidratos simples, ten en cuenta que en el jamón serrano son prácticamente inexistentes, lo que lo convierte en un alimento muy útil en las dietas de adelgazamiento.
- Aliado contra el colesterol: como hemos visto, se está estudiando el papel que el jamón serrano puede desempeñar a la hora de reducir o regular los niveles de colesterol. En este sentido, es una buena fuente de ácidos grasos insaturados -entre los que destaca el ácido oleico-, lo que puede contribuir a mejorar el balance lipídico entre colesterol LDL y HDL, es decir, entre el ‘malo’ y el ‘bueno’. No olvidemos que el ácido oleico es el mismo que el del aceite de oliva, por lo que su consumo puede ser interesante para la salud cardiovascular.
El jamón te ayuda contra la osteoporosis
Aunque tradicionalmente pensamos en el calcio como el mejor aliado contra la pérdida de masa ósea, recientes trabajos han puesto de manifiesto que también el consumo de alimentos ricos en hierro es una excelente estrategia para prevenir la osteoporosis. Según se ha visto, incluir en la dieta niveles adecuados de hierro durante las primeras etapas de la vida puede contribuir a reducir la incidencia de este trastorno en edades más tardías. En este sentido, el jamón serrano es un alimento muy rico en hierro, lo que, además, nos ayuda a disminuir el cansancio y la fatiga.